Según el analista político Carlos Fara, al presidente de la Nación Javier Milei lo favorecen dos factores: 1) una sociedad que apostó al riesgo por lo desconocido luego del fracaso de los representantes del statu quo, y por eso tendrá más paciencia de la imaginada, y 2) la ausencia de liderazgos opositores sólidos, con la consecuente falta de alternativas programáticas. Respecto a este segundo aspecto, la “rebelión en la granja” que se empezó a visualizar esta semana en la ¿ex? Unión por la Patria, indica la punta del iceberg de un deterioro estructural, que hemos analizado muchas veces, indica el consultor.
“Cuando se habla de estadistas exitosos en la Argentina -gusten o no los nombres- se habla de líderes muy pragmáticos: Roca, Perón, Frondizi, Menem, por ejemplo. Todos pegaron un volantazo sin que se les moviera un pelo y poco importó que hayan sido profundos incoherentes”, puntualiza en uno de sus análisis semanales.